El abogado del hijo de la víctima, imputado por abuso sexual y asesinato de su madre, aseguró que fueron provocadas con un objeto con punta redondeada. Y agregó que también hay "otro hecho probatorio que revela" que "efectivamente no fue violada y no estuvo voluntariamente en la cama".
El abogado defensor de Facundo Macarrón aseguró hoy que las lesiones que presenta el cuerpo de Nora Dalmasso no son compatibles con las de una relación sexual, aunque haya sido violenta, sino que fueron provocadas con un objeto con punta redondeada.
Marcelo Brito, defensor del hijo de la víctima, explicó que "las lesiones en zona anal y vaginal son absolutamente incompatibles con la práctica sexual, aunque fuera intensa, en una mujer que tenía vida sexual anterior".
"Los hematomas internos que registra en zona vaginal, todo hace suponer que el elemento romo y duro no pudo haber sido un pene o los dedos", sostuvo el letrado, en base a consultas que realizó con un grupo de especialistas que lo están asesorando en el caso.
Brito convocó a un grupo de prestigiosos expertos -cuyos nombres se negó a revelar- luego de que Facundo fue acusado por el fiscal Javier Di Santo de homicidio agravado y abuso sexual en grado de "sospecha leve".
En declaraciones a radio Mitre, Brito detalló que con ese cuerpo de asesores y con el viudo de Dalmasso, Marcelo Macarrón, realizaron una especie de reconstrucción en la habitación de la hija de Nora, donde la Policía halló el cuerpo.
Dijo que tras analizar las fotografías que constan en el expediente y el lugar del homicidio, hubo dos cuestiones que le llamaron la atención: la ubicación de las pantuflas y los anteojos de la mujer dentro de la pieza.
"La víctima es una persona casi obsesivamente ordenada y refiere su cónyuge que en el momento en que se acostaba, durante años, él siempre pudo apreciar que Nora dejaba las pantuflas en una misma posición, juntas y en forma paralela", explicó Brito.
Al respeto, subrayó que "las fotografías de la escena del crimen revelan algo diferente: no estaban juntas, no estaban paralelas y a una distancia superior a los 60 centímetros del borde de la cama".
"Esto revela claramente que no fueron dejadas como hacía la víctima", dijo el abogado y señaló que esta circunstancia es compatible con que haya sido "arrojada a la cama con las pantuflas aún puestas", lo cual indicaría una relación no consentida.
Para Brito, también hay "otro hecho probatorio que revela o corrobora" que Nora "efectivamente no fue violada y no estuvo voluntariamente en la cama" y es el hecho de que sus lentes de lectura fueron hallados muy lejos de la mesita de luz del cuarto.
Según el letrado, Macarrón relató que "Nora acostumbraba a acostarse y leer y dejaba sus anteojos en una mesa de luz que estaba a su izquierda" en una habitación que tiene camas cuchetas en forma perpendicular.
"Hay una madera correspondiente a la cama superior que tapa la mesa de luz y las fotos revelan que los anteojos han caído en un lugar que es absolutamente imposible que se compatibilice con la tesis de que en algún momento se cayeron de ahí", explicó Brito.
Nora Dalmasso fue hallada asesinada la tarde del domingo 26 de noviembre pasado desnuda en su casona del barrio Villa Golf de Río Cuarto, a 230 kilómetros al sur de la capital provincial.
Según la autopsia la mujer murió por "estrangulamiento", ya que se hallaron lesiones muy contundentes, y tenía un lazo alrededor del cuello y signos de las yemas de dedos del asesino.
Los peritos descartaron "totalmente" la asfixiofilia o el juego sexual como causa de muerte y afirmaron que presentaba lesiones y fisuras en el ano y lesión genital o paragenital no compatibles con una práctica de sexo común o normal.
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